|
|
|
Este avispado ladrón de coches tiene un largo currículum como ladrón, ya que tiene en su poder más de 500 coches de lujo. |
No roba los coches para luego venderlos, sino para disfrutarlos y sentir el placer de la velocidad. |
Tal es su pasión por robar vehículos de lujo, que a esta pobre criatura le robó su cochecito, marca Jané-lujo dejandola sin medio de transporte. |
|
|
|
Asegura que uno de los mayores placeres de los coches de lujo es el poder sentir su "melena al viento". |
Como la mayoría de criminales, no se dedica sólo a los robos, es a demás un malvado explotador de menores, que obliga a sus hijos a limpiar sus vehículos uno por uno. |
Siempre que duerme sueña con robar el famoso F1 de la escuderia de Ferrari justo antes de empezar la carrera, para que todos vean que es un ladrón inimitable. |
|
|
|
Los psiquiatras del centro donde estuvo internado, le han diagnosticado una cleptomanía hiper-mega-aguda, incurable. |
Tanto es así que nunca logra acabar una partida de su juego favorito, el billar, por que antes de acabar ya han desaparecido todas las bolas. |
Ahora asegura que está en terapia, para intentar reducir su cleptomania. El medico y todos sus compañeros tienen que ir a terapia en metro, misteriosamente sus coches han desaparecido. |